jueves, 2 de abril de 2020

Día 19. 2-4-2020. Confinamiento por la pandemia del Coronavirus.


Día 19 en Tembleque. Quiero pensar que hemos llegado al pico de la epidemia en nuestro pueblo, o que al menos estemos en una especie de meseta, pues según datos oficiales, se mantienen los mismos casos oficiales que en los cuatro últimos días, ni uno más, ni uno menos. Sin variación. Hay que tener esperanza de que la cifra, al igual que la famosa curva, empiece a bajar.
Como podréis comprobar, cada día escribo esta particular crónica más tarde, pues sinceramente, no doy abasto con todas las publicaciones, pero bueno, mientras pueda, ahí estaré, al pie del cañón.
Hoy ha vuelto a llover en varias ocasiones, superando así, en el acumulado de los últimos días, los 30 litros por metro cuadrado. Comentaba el otro día un buen amigo de Turleque, mi tocayo, literalmente: "Desde que el mundo ha parado, ha dejado de ser verano casi permanente, y volvemos a ver las nubes y la lluvia, ¿casualidad?". Y ciertamente, en estos días, yo creo que el gran beneficiario de todo esto es el medio ambiente, que se ha visto de golpe y porrazo libre de toda polución. Cierto es que en nuestro pueblo, así como los de alrededor, nunca ha habido gran polución, pero a nivel general, supongo que algo se debe notar.
Eso sí, a falta de polución, lo que lamentablemente continuamos viendo en Tembleque es falta de civismo por parte de algunas personas. No me refiero a saltarse el confinamiento, sino que a que cada vez se ven más guantes desechables tirados por nuestras calles, llegando incluso el Ayuntamiento a tener que emitir un comunicado, para pedir responsabilidad y respeto. Me consta que la Policía Local y Guardia Civil van a extremar la vigilancia de este tipo de conductas.
Seguimos los agricultores, al igual que los servicios municipales del pueblo, desinfectando las calles y contenedores. Esta mañana, una nueva batida, procurando llegar a todos los rincones posibles.
Esta tarde, a las 20h en punto, coincidiendo con la salida a balcones de vecinos, ha comenzado una repentina granizada, que a pillado a todo el mundo por sorpresa, justo en los pocos minutos que nos asomamos a ventanas y balcones. Aún así, se han vuelto a repetir escenas de lo más emotivas y solidarias, como un nuevo cumpleaños a una vecina, María, amenizado nuevamente por Protección Civil de Tembleque, en una sorpresa preparada por su abuela. O también nuestra vecina Isabel, que ataviada como Pipi Calzaslargas, ha amenizado a todos los niños de su calle de enfrente. Pequeños gestos que engrandecen a las gentes de nuestro pueblo, más unida que nunca.
Hoy en el blog hemos tenido un pequeño paréntesis en cuanto a temática, pues nuestro buen amigo e historiador Pepe García Cano, ha compartido unos interesantísimos apuntes históricos sobre nuestro pueblo. ¡Qué ganas de volver a retomar ese tipo de reportajes sobre nuestra historia!, y que lamentablemente, me veo en la obligación moral de dejar aparcados, también por falta de tiempo, pero bueno, no descarto poner alguno que otro durante los próximos días. Nos quedan algunas fotos de Catalá-Roca por compartir, y alguna que otra sorpresa. Mañana, nos evadiremos otro pequeño ratito de la pesadilla, disfrutando de un nuevo relato de nuestro amigo José Antonio Fraguas.
Retomando el tema de los daños colaterales del estado de alarma, esta noche se ha publicado un comunicado por parte de todas las Hermandades de Tembleque, que además, han compartido la imagen de lo que hubiera sido el cartel oficial de la Semana Santa 2020, que ya tenían preparado poco antes de saltar todas las alarmas. También seguimos compartiendo las Novenas de la Hermandad de Ntra Sra de la Soledad. Mañana viernes será la quinta y última.
Poco más os puedo contar a nivel local. En lo personal, pues esta semana la ocupo principalmente con el tema de las clases online de mis hijas. Bendito Skype, que nunca había yo utilizado, y ahora es el pan nuestro de cada día. Os aseguro que los alumnos, al menos en Tembleque y Villacañas, están igual de atareados que si tuvieran clases presenciales, como de hecho así debe ser. Además, durante esta semana, a pesar de las lluvias, si mal no recuerdo, no ha llegado a volverse a ir la luz ni internet en Tembleque. No obstante, señores de Naturgy, no se nos olvidan las penurias que nos han hecho pasar en los primeros días de confinamiento; y no se nos olvidan simplemente porque me consta que a todos los que les pusimos reclamaciones, ustedes mismos nos están contestando depurando sus responsabilidades, sin hacerse cargo de ninguna de esas reclamaciones, lavándose las manos con respuestas automáticas, y encima con el valor de ofrecernos una encuesta para que valoremos su servicio. ¡Qué ganas tengo de rellenarla!
Hay muchas cosas que corregir cuando pase esta pesadilla. Ahora no es el momento.
Hoy finalizo volviendo a hablar sobre el medio ambiente, con una preciosa fotografía de la cigüeña, bebiendo el agua acumulada tras las lluvias en la zanja, tan tranquila, ajena a toda preocupación, salvo la de su propia supervivencia, que en su caso quizás ahora esté menos amenazada que nunca.

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