Llegamos al vigésimo cuarto capítulo de los documentos y textos de la historia de Tembleque, hoy titulado: "La persecución religiosa", un texto escrito por Juan Francisco Rivera en 1958, donde nos cuenta desde su postura ideológica, los estragos que sufrieron los Temblequeños a partir de 1935, y durante toda la Guerra Civil. En primer lugar nos informa que desde entonces, las procesiones y entierros estaban prohibidos. Mucho más desgarrador es el testimonio de cómo fusilaron al cura del pueblo, Jesús Granero Esteso, en el cementerio de La Guardia. Más tarde también fusilaron a Ursinio Pérez Chozas, el párroco de El Romeral que durante el verano del 36 estuvo en Tembleque junto con el coadjuntor, Vicente Morales Galán, también fusilado, junto con Ursinio y la maestra Antonia González, de Tembleque, aunque este último dato no aparece en el documento. Este negro capítulo ocurrió el 5 de diciembre de 1936 en el cementerio de La Guardia.
Continúa el documento con un detallado inventario de lo que se destrozó y/o perdió en la Iglesia Parroquial y el resto de las ermitas durante los años que duró la guerra, desde el mítico retablo, (en próximos capítulos veremos algunas fotografías), pasando por más de 90 imágenes, cuadros antiguos, el órgano, el armónium, cálices de plata, y un largo etcétera, del que parece ser que sólo se salvó una campana en mal estado, una cruz pequeña de plata y una naveta e incensario.
Son sólo tres páginas, pero están cargadas de emociones muy intensas: Acceso desde este enlace de issuu.com. Añado también este enlace desde Google Drive, con opción de descarga del pdf.
Siguiente entrega: "A LA POBLACIÓN DE TEMBLEQUE"