
Me puse en contacto con Raúl, de la Asociación ESPARVEL, y tras ver las fotografías me lo explicó perfectamente:
Las rapaces y en especial las carroñeras tienen áreas de campeo enormes. La media de los buitres es entorno a radios de 50 - 70 km. Pero esto es sólo la media; pueden recorrer distancias mayores.
No es nada inusual verlas por Tembleque, están por ejemplo ahí cerquita, en la sierra del Buey en Mora.
Luego están las zonas de dispersión; estas abarcan más superficie todavía, es el área que usa una rapaz tras emanciparse (1er año) hasta que encuentra su zona de cría y alimentación.
Cuando me lo has comentado pensé que era el típico buitre que se pone ciego a comer y necesita un par de días de digestión hasta que puede reanudar el vuelo.
Pero en las fotos se ve que es un juvenil de este año. Casi es un volandero. Asi que se trata de un jovenzuelo bastante despistado que está buscando su sitio, y que por su inexperiencia ha acabado en los tejados de Tembleque.
Hasta ahora, tan sólo en una ocasión había logrado ver un buitre negro en Tembleque, y fue en el campo, por la zona del restaurante "El Queso", cerca de la autovía A-4. Es la foto de la derecha, que curiosamente fue justo hace un año casi exacto (7 de octubre de 2010)
Raúl me pasaba el enlace de un trabajo realizado por Javier Blasco Zumeta, en cuya web encontraréis un amplio catálogo ornitológico elaborado por él, durante el anillamiento de las aves.
Este es su reportaje sobre los juveniles de buitres leonados, como es el caso del que nos acompañó en Tembleque; también me puse en contacto con Javier Blasco, para mostrarle las fotografías; según su teoría, más que despistado, lo que estaría es muy débil por no poder comer; eso hace que sea remiso a volar.
También grabé un pequeño vídeo, aunque apenas se movió durante dicha grabación. Fue cuando estaba en la calle Castelar, en el cruce con la calle Iglesia. Por lo visto, desde ese lugar se trasladó hacia la Casa de las Torres. Durante la mañana del lunes día 10, se acercaron los agentes medioambientales responsables de la zona. No apreciaron que estuviera herido, motivo por el cual no intentaron cogerlo. Así pues, no estamos seguros de que aun esté por nuestra zona. El martes por la mañana aún se le había visto por algún tejado de Tembleque; desde entonces, le hemos perdido el rastro.
Aunque no es muy habitual que estas aves se acerquen a los núcleos urbanos, en esta noticia del ABC comprobaréis cómo otro buitre leonado se posó sobre un tejado del casco antiguo de Toledo durante unas horas, siendo una atracción turística más.
Ójala este ejemplar haya vuelto a su hábitat, muy posiblemente por las sierras de Mora, sano y salvo.
Varios meses después de publicar este reportaje, lo edito añadiendo nuevos datos e imágenes. Resulta que tras perder el rastro de este buitre sobre el casco urbano de Tembleque, apareció unos días más tarde, junto con algunos ejemplares más, revoloteando sobre la zona arbolada de la depuradora, en el camino Parrales, como a un par de kilómetros del pueblo, saliendo por la carretera de Mora. Varias semanas después se pudo ver por la zona del valle, aunque ya no se puede saber si se trataba del mismo ejemplar, pues en esa zona, y hasta la sierra de Mora, se sabe que existen más ejemplares.
Jose Luis Gómez Fdez-Mazarambroz pudo sacar unas fotografías extraordinarias durante el paseo de este buitre leonado sobre la Casa de las Torres, y para finalizar os las presento, junto con las anteriores, en el siguiente álbum de Picassa, agradeciendo a Jose Luis su colaboración para poder finalizar el reportaje de esta manera tan ilustrativa.