En esta ocasión, el temblequeño Juanjo Puyo nos adentra al mundo del pintor estadounidense Edwar Hopper (1882-1967), para mostrarnos 13 de sus más famosas obras, reproducidas fielmente por nuestro paisano, incluyendo incluso una pequeña escultura, en el caso de la obra titulada "Sol de la mañana", de 1952.
Tal y como se puede leer en la propia exposición, sobre el autor original:
Hopper es uno de los máximos representantes del realismo estadounidense, y no hay nada más americano que su obra, que muestra escenas contemporáneas rurales o urbanas, personajes solitarios, aún rodeados de gente, figuras en silencio que retratan a la perfección este occidente cada vez más deshumanizado.
Sus figuras solitarias reflejan la incomunicación moderna mediante grandes espacios vacíos. Sus rostros son a menudo difusos, genéricos e inexpresivos. Las perspectivas son sencillas y geométricas, destacando las líneas rectas en apagadas tonalidades, que amplifican esa melancólica impresión de soledad y aislamiento.
De hecho, tuve oportunidad de charlar un rato con Juanjo Puyo, durante la exposición, y me comentó que Hopper es uno de sus pintores favoritos, tanto de él como de su maestro, y esta exposición es un fiel reflejo de ello.
Vamos a compartir en este artículo un vídeo, recorriendo toda la exposición, y para finalizar, os invito a ver con más calma el álbum fotográfico, donde podéis comparar todas las obras de Juanjo Puyo con las del autor original, Edward Hopper, para que apreciéis el gran parecido, casi calcado, de todas las pinturas.
Para finalizar, como os he comentado anteriormente, os animo a ver con más calma el álbum fotográfico, donde poder comparar los originales con las copias pintadas por nuestro paisano Juanjo Puyo.
Las 13 obras de la exposición han sido: "Sol de la mañana" (1952), que incluye tanto pintura como escultura, "Despacho en una ciudad pequeña" (1953), "Conferencia en la noche" (1949), "Hotel junto a un terraplén del ferrocarril" (1952), "Pensilvania" (1947), "Los noctámbulos" (1942), "Habitación de hotel" (1931), "Mesa para damas" (1930), "La gasolinera" (1940), "Automat" (1927), "El palco" (1927), "Autoretrato" (1925-1930) y "Ventanas" (1928).
Vaya desde aquí mi más sincera enhorabuena a nuestro artista, Juanjo Puyo, y esperamos volver a disfrutar de sus obras, ya sea en pintura o cualquier otra disciplina, en futuras exposiciones en nuestro pueblo.
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