No es la primera vez que hablamos de este gran fotógrafo en el blog, pues si recordáis en este enlace, en abril de 2022 hubo precisamente una exposición fotográfica en la oficina de Turismo de Tembleque, aunque en el caso de Tembleque, únicamente fueron expuestas tres fotografías, y el resto fueron de otros lugares de la provincia de Toledo.
Vaya desde aquí mi agradecimiento a nuestro amigo e historiador Roberto Félix, que fue quien en un primer momento me ingormó sobre este nuevo lote de fotografías digitalizado por la Real Fundación de Toledo.
En este artículo nos centraremos, obviamente, en las fotografías de Tembleque, que en su práctica totalidad corresponden a la Plaza Mayor y los arcos principales, con una única excepción de un muro de tapia, ya publicado en el primer artículo, y que aunque pueda parecer un lateral de la Casa de Postas, en realidad no logro ubicarlo.
A continuación, voy a destacar algunos de los mejores detalles, a mi juicio, de las 28 fotografías de Tembleque en 1965, (que dejo todas alojadas en su formato y resolución original en este álbum de Google Photos):
Parece que el fotógrafo, Carlos Flores, realizó todas las fotografías el mismo día y prácticamente a la misma hora, puesto que se aprecia en muchas de ellas los mismos vehículos y las mismas personas. Tomó las fotos tanto a ras de suelo como desde lo alto de los corredores. También comentar que la Plaza Mayor estaba recién restaurada, pues apenas tres años antes tenía aún árboles en su interior. Con la restauración de 1961, hemos conocido la Plaza así hasta hace apenas 4 años, con la última restauración del solado integral.
Comenzamos con una donde se aprecia perfectamente el vehículo llamado popularmente "La Rápida", que llevaba a los viajeros desde el centro del pueblo a la estación de tren, por aquella época un medio de transporte muy utilizado. Tenemos muy pocas fotos de "La Rápida" (las mejores en este archivo del fotógrafo Catalá-Roca, en los años 50 y 60), y desde luego creo que ninguna con el vehículo aparcado justo enfrente del Ayuntamiento. Además, este vehículo fue algo posterior, apenas unos pocos años, al de la foto de Catalá-Roca. Este último, según nuestro paisano Miguel Ángel "Quinielas" (propietario de "La Rápida" desde sus inicios, en los años 50), tenía más plazas que el anterior. También tenía otro color más claro en su carrocería.
Preciosa panorámica desde los arcos principales; sigue al fondo "La Rápida", además de varios vecinos en la Plaza de la Orden.
Primer plano del antiguo edificio de la carnicería, donde hoy está el kiosko de chuches.
El mismo edificio, con uno de los modernos tractores de aquella época, de los primeros que iban llegando a Tembleque.
Lo que era el Mesón Venta de Tiembles, actualmente de la Escuela de Hostelería, y antigua Posada.
Esa niña que aparece supuestamente con su madre, debe ser ahora una mujer de unos 65 años. ¿Alguien la conoce?
El Callejón del Toril. Se aprecia que al fondo, literalmente salíamos directamente al campo, ya no había más urbanizaciones.
Desde los arcos principales, se aprecia parte del kiosko o templete del centro de la Plaza de la Orden.
Según se explica en la web de la Real Fundación de Toledo, respecto al Archivo de Carlos Flores, dice textualmente así:
El doctor arquitecto Carlos Flores (Cuenca, 1928) es considerado el gran recopilador gráfico de la arquitectura popular española en los años 60 y 70. Su legado de casi 12.000 fotografías es custodiado por el Museo Etnográfico de Castilla y León, ubicado en Zamora. En el mes de julio de 2023, la Real Fundación de Toledo firmó un contrato de colaboración con dicho Museo, dependiente de la Junta de Castilla y León, para la digitalización de la parte toledana del legado de Carlos Flores que se encontraba aún en formato únicamente analógico, en una caja con más de 500 negativos.
Las imágenes que aquí pueden consultarse son el resultado de un intenso trabajo de campo realizado por Flores en aquellas décadas, fotografiando los vestigios y ejemplares más destacados de la arquitectura popular en España. Este inmenso esfuerzo se plasmó no solo en varios volúmenes con lo mejor de su trabajo, publicados en 1973 bajo el título “Arquitectura Popular Española”, sino en gran cantidad de fotografías obtenidas por toda España que todavía no han salido a la luz. Se trata de más de 11.500 negativos que captaron la esencia de la arquitectura popular de toda la geografía nacional, en una época de profundos cambios debidos al auge del desarrollismo, que se estaba llevando por delante —simultáneamente al trabajo de Flores— buena parte de ese patrimonio y formas de vida, por lo que su obra constituye una especie de rescate gráfico in extremis logrando la fijación en imágenes de un legado en buena medida ya desaparecido. Su obra muestra el estrecho vínculo que se establece entre las personas y el ámbito físico que habitan mediante la utilización en sus construcciones de los recursos naturales disponibles en cada lugar. Estas fotografías son un excepcional registro de la herencia arquitectónica de nuestros antepasados, y nos acercan a un tiempo en el que se buscaban soluciones técnicas que permitieran levantar edificios adaptados con coherencia al medio y a las necesidades cotidianas. Su contemplación nos sugiere, además, posibilidades reales de aplicación en la actualidad.
Para finalizar, lo hacemos compartiendo la totalidad de las 28 fotografías, desde este enlace de Google Photos, descargadas directamente desde la Real Fundación de Toledo.
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