Antaño, esta era una de las mayores Fiestas del pueblo, ya que todos los agricultores iban con sus mulas, perfectamente engalanadas, a la Procesión. Tal era de larga, que según me han comentado los más mayores, llegaba la fila de mulas hasta la Cruz Verde, en aquellas épocas en las que no había tractores. También se sorteaban gallos frente al muro de la ermita, entre otras costumbres.
Hoy en día, la tradición se mantiene, aunque ha ido cambiando de costumbres. No se sortean gallos, pero sí un cochinillo, que este año ha ido a parar al número 198.
Por ello, los animales que se Bendicen son principalmente domésticos, como perros, aunque este año no ha faltado algún caballo, un pony o varias cabras, entre otros.
El párroco Don Carlos los ha ido bendiciendo uno a uno, tal y como veréis en el vídeo de este reportaje.
Posteriormente, comenzó la tradicional misa, en la ermita de San Antón, con unas nuevas sábanas que adornaban el altar, donadas por nuestra paisana Gema.
Lo noche era bastante agradable, y además viernes, por lo que la gente acudió en gran número a celebrar esta Fiesta. No cabían todos en la ermita, por lo que muchos vecinos se quedaron esperando fuera a que terminara la misa.
Fue en ese momento cuando comenzó la Procesión con la Imagen de San Antón, que fue restaurada el año pasado. En esta ocasión, la Imagen de San Antón también estrenó unas nuevas andas.
Durante toda la Procesión, la Asociación Musical "Cristo del Valle" estuvo acompañando y tocando, junto a numerosos vecinos, el párroco y parte de la Corporación Municipal.
Al término de la Procesión, se procedió a encender la hoguera. La ausencia de viento y la abundante leña, motivaron que las llamas fueran especialmente altas y duraderas.
Para mantener la tradición, durante la hoguera, se repartió el puñao, por parte de varios vecinos del popular barrio de San Antón, junto al alcalde y varios concejales, que consistió en un revuelto de frutos secos y varios refrescos, todo ello amenizado por la Asociación Musical "Cristo del Valle".
Y así, poco a poco, al calor de la hoguera y entre charlas animadas por parte de todos los vecinos asistentes, la gente se fue yendo a sus hogares, con la satisfacción de haber pasado un rato de lo más agradable, entre amigos, vecinos y familiares, en este entorno tan acogedor que siempre ha sido el barrio de San Antón en nuestro pueblo.
Un amplio resumen de toda esta Festividad (Bendición de animales, salida y llegada de la Procesión, hoguera y puñao), podéis ver a continuación, en el siguiente vídeo:
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