Llegó la lluvia de otoño.

Tras uno de los años más secos que recordamos en Tembleque, al fin llegaron las primeras lluvias otoñales de 2012.
 El invierno pasado ya fue muy seco, al igual que la primavera, que sólo llovió durante el mes de abril. En verano, salvo una tormenta a principios del mes de junio, no volvió a caer una sola gota de agua hasta ayer, algo que todos esperábamos con ganas. De ahí que con entusiasmo comparta con todos un vídeo que no tiene valor alguno, pero sobre todo a los temblequeños que no viven en el pueblo les agradaré visionar, pues aprovechando que esta mañana tuve que salir a hacer unas gestiones a otros pueblos vecinos, puse la cámara en el salpicadero del coche, grabando todo el recorrido mientras la lluvia mojaba las calles del pueblo. No era a esas horas de la mañana muy copiosa, aunque luego ha continuado durante todo el día.
En una mañana rutinaria bajo la lluvia en Tembleque, comenzamos en la calle Serna, llegando inmediatamente a la calle Gracia, pasando bajo el recién restaurado arco Norte (o arco de Narcisa, próximo reportaje con todo el proceso de restauración) para acceder al incomparable marco que siempre nos ofrece la Plaza Mayor. Continuamos por la Plaza de la Orden y la calle Iglesia, donde a la vuelta de ésta, podemos observar la furgoneta de los trabajadores de la restauración, que tras llegar al pueblo a primera hora de la mañana, no tuvieron más remedio que dar media vuelta y volver a sus respectivos hogares, pues nada pueden hacer en el tejado de la Iglesia mientras continúe la lluvia. 

Los paraguas fueron fieles aliados de todos los que tuvimos que salir por nuestras calles.
 Continuamos hasta llegar a la calle Convento, donde vemos otra escena habitual; al panadero con su impermeable, imprescindible para poder repartir el pan en una mañana pasada por agua. Seguimos hacia la salida del pueblo, por la rotonda y el puente de la carretera de Villacañas. Era aproximadamente las 9:30h de la mañana. Finaliza el vídeo con algunas imágenes de la zanja, que siempre que llueve es la primera en llenarse de agua, pues realmente esa es su función; evacuar esas aguas hacia la zona de la vega, para que no inunden el centro del pueblo.

Y por completar un poco más, también por la tarde tuve que salir con el coche, alrededor de las 19 horas, en esta ocasión por la calle Malecón, cruzando nuevamente la zanja por la zona de los tarays, (en el cruce con la calle Prior), la calle Comisario, el final de la zanja, saliendo del casco urbano, donde hago una breve parada para verla cargada de agua más detenidamente; continuamos bordeando el colegio por el puentecillo de hierro, calle Santa Ana, Cuatro Calles, Calle Consuegra y finalizamos de nuevo por la comunmente llamada M-30, la calle Malecón. Lloviendo durante todo el recorrido.
El resto de fotografías en el siguiente álbum de Picassa:
Poco más de momento, espero que esta crónica junto con las imágenes os haya agradado. El año hidrológico, según las cabañuelas, se prevee generoso.